“Decidí ser neonatóloga a los 19 años cuando recibí por primera vez un bebé, siendo estudiante de medicina y completamente sola. La mamá tenía más experiencia que yo y fue ella quién me guió para hacer contacto piel a piel en cuanto naciera Daniel. Fue un parto respetado en un medio no tan adecuado, pero me enseñó que son las personas que estamos presentes en un nacimiento, los que podemos hacer una gran diferencia en la humanidad cuando se nace con amor y respeto, por eso quise fundar Golden Hour México en honor a este primer momento. Me gusta la música, meditar y como buena colombiana me encanta el café y bailar, amante de los animales, tengo tres perros y también orgullosa de un maravilloso y talentoso esposo."